[OPINIÓN] PANG ADVENTURES

En esta entrada toca hablar de Pang. Una saga de videojuegos con mucha solera que acaba de aterrizar en Switch hace escasos meses con una nueva entrega desarrollada por la gente de DotEmu, especialistas en devolver a la vida IPs clásicas.

Tras mucho tiempo perdida en el olvido, Pang vuelve con no pocos cambios para enseñar a las nuevas generaciones por qué fue un clásico de las máquinas recreativas y conseguir atrapar de nuevo a los que lo jugamos en su día.

Ping, Pang… ¡Y cinco duros menos!

Como buen arcade que se precie, Pang era un comedero de monedas de cinco “duros”. Sobretodo cuando se empezaba a dar los primeros pasos en el juego. Pantallas llenas de bolas de diferentes tamaños, enemigos que te paralizan, escaleras, plataformas… un conjunto de elementos que te exigían estar muy concentrado para no acabar perdiendo una vida sin darte cuenta.

La agilidad a los mandos era una virtud que tenía que tener todo jugón para no acabar “malgastando” los ahorros durante las partidas. Los más habilidosos no necesitaban pensar tanto cada jugada, y los más valientes, se atrevían a coger la dinamita para que todas las bolas del escenario se dividieran en la unidad mínima. Un festival de pelotas mortales. Momentos que se repetían mucho en el modo “INFINITO” y que daba lugar a las partidas más épicas. Sobretodo a dos jugadores.

Pues bien, Pang Adventures, cambia radicalmente su estructura para convertirse más en un puzle y dejando su esencia por el camino sin perder las mecánicas básicas, eso sí.

El tiempo se va rodando

Como decía, Pang Adventures, es más un puzle que un Pang clásico. Sí, contamos con todos los elementos que hicieron grande a la franquicia: diferentes tipos de armas, morir con un simple toque, varios tipos de movimientos para las bolas… pero todos se utilizan con un fin distinto al original. En Pang Adventures también debemos reventar todas las bolas pero en este caso de la manera más eficiente posible. El tiempo es muy justo. Y el perder la fase suele venir antes de que se agote el tiempo que de que una bola nos toque. Por esa razón, se ponen a nuestra disposición distintos tipos de armas como ametralladoras o lanzallamas (con munición limitada) en zonas muy concretas del nivel y que son unas máquinas de reventar bolas en poco tiempo. Y quizás no merezca la pena usarlas en un principio para juntar todas las bolas en un punto y dar el empujón definitivo de una vez.

He aquí la gran diferencia respecto a anteriores entregas. Diferencia que se acentúa a medida que van apareciendo nuevos tipos de bolas que reaccionan de manera muy distinta a nuestros ganchos. Unas sueltan humo que nos limita la visión, otras lanzan una corriente eléctrica a lo largo del gancho que nos mata si estamos cerca, otras sueltan sustancias viscosas que nos ralentizan… Son unos ejemplos de los varios tipos que nos podemos encontrar que hay.

Otro punto diferenciador con respecto al original son la inclusión de Jefes Finales de zona. Cada vez que se completan con éxito los 15 de niveles de cada sección, aparece el líder alienígena que quiere dominar el mundo con sus pompas (sí, Pang Adventures añade una trama ridícula como excusa). En estas fases, además de reventar las pompas para defenderse hay que atacar con todo el arsenal en nuestra mano al alien para sobrevivir. ¿El problema? Que visto uno vistos todos. No se hizo el esfuerzo de crear enemigos únicos lo que le hubiera dado al título un empaque mucho mayor. Salvo el jefe final.

En cuanto a modos de juegos sí que no hay queja. Están todos los clásicos. El Modo Tour, el Modo por Puntos que es igual que el Tour solo que no tenemos vidas ilimitadas y debemos sobrevivir con las 3 iniciales; y Pánico. El modo por Puntos y Pánico se desbloquean una vez se complete con éxito el Tour. Y en pánico, es donde más se puede ver ese espíritu arcade de las recreativas en el que esencial ser un as a los mandos. Pero tiene un problema, un problema compartido en el resto de modos. Por alguna razón, el tamaño más pequeño de bolas ha desaparecido. Esas minibolas tan puñeteras tan difíciles de tener controladas y que se podían meter por cualquier recoveco. Esa decisión hace de Pánico un modo mucho más fácil y accesible que sus predecesores.

Pang Adventures es un paso a un lado con respecto a la franquicia. Pese a ser un juego divertido y que puede dar para horas y horas de entretenimiento, también puede llegar a defraudar a cualquiera que se acerque con la idea de rememorar un clásico con nuevas ideas. De todas formas, tras esa posible decepción inicial, se le puede sacar partido.